Y yo me voy con mi guitarra para México...

Este viernes (que en España ya es pasado mañana) cojo un avión y me pongo en México, donde me espera mi pinche Guillermo, gran compañero de viajes y mejor amigo desde que nos conocímos en Marruecos hace ya más de dos años. El plan es huir del Halloween estadounidense (que tampoco me hubiera importado conocer, pero la verdad es que este plan es unas chopocientas veces más atractivo) para participar en el Día de los Muertos en la isla de Janitzio (estado mexicano de Michoacán) que por lo que me cuenta mi amigo es el lugar por excelencia de estas fiestas. Llegaremos allí el martes uno después de pasar por Morelia, capital del estado, y Maruata, una playa virgen del Pacífico. El miércoles iremos a Puebla, en cuya universidad estudia mi amigo y el fin de semana pasaremos por Córdoba que es su lugar natal... se me hace la boca agua sólo de pensarlo... no he podido evitar estar de buen humor las dos últimas semanas sólo de pensar en este viaje, a pesar de que nos están friendo a exámenes y trabajos en la universidad... Por otra parte este viaje quiere decir que es probable que este sea mi último post hasta después del día 6, que es cuando vuelvo (aunque cuando vuelva estaré hasta el cuello de trabajo y quizá necesite algún día más para encauzar las cosas...), aunque quién sabe si lo mismo encuentro un hueco para bloguear desde allá. Aviso porque luego va la gente por ahí insinuando que este blog pueda estar muerto... Y aunque éste blog no ha llegado a la mayoría de edad, ni sé si llegará, aunque aún pasan muchos días sin publicar y luego hago n entradas de golpe (jo... es que la vida "a la erasmus" tiene muchos altibajos y muy poca rutina y es dificil mantener hábitos) este blog todavía tiene algo que decir. Como poco, que tal lo pasé por México. Nos vemos, cuidaos.